Pedagogía holística
¿Qué es Pedagogía holística?
La Pedagogía holística busca transformar la educación en una experiencia enriquecedora que prepare a los estudiantes para ser individuos completos, capaces de desenvolverse de manera armónica en la vida y en la sociedad, en un mundo en constante cambio.
Una educación basada en la Pedagogía holística, se caracteriza por:
- Creatividad: Los niños aprenden a relacionar conceptos e ideas aparentemente dispares, por lo que desarrollan su creatividad.
- Solución de problemas: La relación de materias y asignaturas facilita que los niños aprendan a solucionar problemas combinando habilidades.
- Seguridad: Los niños adquieren seguridad en sí mismos y refuerzan su autoestima a través del logro de metas relacionadas con el conocimiento.
- Participación: cualquier alumno puede dar su opinión y compartir lo que haya aprendido. El profesor será el encargado de fomentar la participación de todo el grupo en el aula.
- Planificación: Aprenden a planificar sus propios estudios y a establecer objetivos definidos y realistas. Esto les será útil tanto en su fase de estudiantes como en su vida de adultos.
- Relaciones interpersonales: La educación holística impulsa el aprendizaje colaborativo donde los alumnos aprenderán a ser empáticos, hablar con asertividad y poner en práctica la inteligencia emocional. Esa es la base para generar relaciones interpersonales basadas en el respeto y la confianza.
- Toma de decisiones: Tener conocimientos conectados ayuda a tomar decisiones basadas en un análisis crítico de los datos conocidos, así las decisiones se tomarán más rápido y se basarán en hechos contrastados.
- Enfrentarse a errores: Cuando se buscan soluciones a problemas se aplica de forma continua el sistema prueba/error, de esta manera los niños y niñas aprenden a enfrentarse a la frustración y a gestionar sus emociones.
- Mente abierta: Todo lo anterior supone que se generen mentes abiertas a escuchar respetuosamente y a entender cosas nuevas.
Es una filosofía educativa que considerando al estudiante como un ser integral, abarcando todas sus dimensiones: intelectual, emocional, social, física y espiritual, busca el desarrollo equilibrado de estas dimensiones.