Cierra el grifo mientras te cepillas los dientes o lavas los platos.
Toma duchas más cortas y considera instalar cabezales de ducha de bajo flujo.
Repara cualquier fuga en grifos o tuberías para evitar el desperdicio de agua.
Utiliza plantas nativas y adaptadas al clima local en tu jardín, que requieren menos agua y mantenimiento.